jueves, 22 de marzo de 2012

Mar



Sencilla me postro ante tí
con mi presente y mi pasado,
como alumno y profesor,
como el juez y el acusado.


Transparente me muestro
y tras de mí me oculto.
Soy una y soy dos,
soy la espuma y el mar profundo.


Oscilando entre planos
soy una y mil cosas
serpenteo entre consciencias
como el abismo y las olas.


Transparente me muestro
y tras de mí me oculto.
Soy una y soy dos,
soy la espuma y el mar profundo.




Mar Gabarre

miércoles, 21 de marzo de 2012

Colección Naamio



Mural en el zoologico de Jerez


Consumismo clásico

Bocetos para escultura


Reflexiones de "las lecciones del dibujo" de Gomez Molina

La pintura china, una forma de conocimiento sagrado.


En este sub-capítulo del libro “Las lecciones del dibujo”, Gómez Molina, nos presenta un modo alternativo de tratar el dibujo y la pintura a través del ejemplo de la pintura china. Nos habla de un contenido universal en la obra que supera la belleza estética, y que logra transmitir verdades y sentimientos trascendentales por medio del intenso trabajo espiritual del artista.


1

Las propiedades del arte


Este texto, me ha hecho volver a reflexionar sobre los distintos estadios del arte, digamos los diferentes campos sensitivos que cubre según su intención. Los podría resumir en: arte visual, arte intelectual y arte emocional o espiritual.
El arte visual, como su propio nombre indica, se ciñe a lo estético, a lo que nuestros ojos perciben y nuestro cerebro procesa, sin mas sentido connotativo, sin contar con nuestras experiencias y recuerdos, y sin una mayor intención de trascender, solo queriendo crear algo bello para el disfrute.
El arte intelectual, trabaja con conceptos que pretende transmitir, ideas, sin por ello, hacerlo por medio de la belleza, a veces ni siquiera a través de un objeto producido, sino cambiando el sentido por ejemplo, de objetos o situaciones cotidianas, queriendo provocar en el espectador una reflexión a cerca de lo que está viendo.
El arte espiritual sin embargo, no está recogido bajo ningún tipo de norma, (composición, color, etc) sino que es producido bajo un criterio individual e intransferible. La obra, nace como producto de un estado particular de consciencia pura, sin ser reprimido por ningún tipo de esquema previo a la hora de concebir la obra de arte.





Las tres propiedades: visual, mental y sentimental



2
Fluctuación de las propiedades


Estas 3 propiedades perceptivas del arte, no se discriminan las unas de las otras, sino que son las tres en conjunto las que se encuentran en cada representación.

            A mi juicio, se disponen en forma de triángulo, y que siguen un orden concreto:
En primer lugar, aparece el estímulo visual, pongamos el paisaje descrito en el capítulo, un precioso paisaje oriental, con bellos montañas que emanan de entre las nubes. Tras el disfrute visual de la imagen que describiremos como “bonita” y dependiendo de tu afinidad personal con la misma, de manera simultánea surgirá el sentimiento, que variará siempre de una persona a otra por nuestras diferentes formas de percibir. (Al igual que hay 3 cualidades para transmitir en el arte que van variando según la obra, hay personas que son mas receptivas para unas cualidades que para otras).
Finalmente, por nuestra naturaleza como animales pensantes, trataremos de buscar una explicación a lo que estamos viendo, o bien lo asociaremos con una idea si es que a tenemos conocimiento sobre el contenido intelectual de la obra.

Encadenamiento sucesivo de percepciones.


3
El artista como canal del arte


Me ha parecido muy interesante como el texto plantea el proceso de la obra, a través de un importante trabajo personal para asimilar la esencia de lo que se está haciendo.
De algún modo, me ha sorprendido encontrarme con esto, pues elegí un capítulo al azar para comenzarlo a leer ¡y me encontré con que es la forma en la que trabajo mis dibujos!
No conocía de otras personas que trabajaran de esta manera, y pensé que quizás fuera una tontería, pues no tiene ningún componente mental.

Para mí, mis mandalas y mis Naamio, son una forma de meditación. Me abstraigo, me olvido de la realidad física para conectar con la espiritual, abro los canales que me conectan con la red de lo sagrado y lo eterno, y me aparto como persona para dejar fluir a través de mis manos aquello que anhela mi espíritu, a través de lineas curvas y rectas, tangencias que luego toman consistencia con los 3 colores, el negro, el rojo y el dorado (cuerpo, pasión y espíritu).
Como describe el texto, “un espacio más allá del tiempo en el que cada una de sus partes está en absoluta armonía con el resto”, me sentí muy identificada con esto, pues cuando hago mis dibujos, en un momento dado todas las lineas coinciden con otras por “casualidad” formándose circulos conectados y tangencias imprevistas.

Además que de forma automática, también reflejo sentimientos concretos, intentando traducirlos de forma literal del corazón al papel, de esta manera, no encuentro ningún intermediario figurativo que provoque un cambio de trayectoria, sino que es un rebote automático,es decir, emisor: corazón->papel, receptor: papel-> corazón.

Personalmente, he vivido experiencias que me llevan a apoyar especialmente esta forma de pintura. Es una pintura universal, impersonal, en la que como en el reiki, la persona se convierte en un simple canal por el que fluye la energía del universo, esa interconexión de las cosas que describe el texto. Al ser una sola y trabajar sobre tantas personas, se producen coincidencias inexplicables, conclusiones que van a la par.



4
Los dibujos universales


Al igual que el humano saca de él toda esta información, también la recibe de forma universal e inconsciente, como pasa con algunos símbolos que actúan de forma única y generalizada, como los del reiki, o algunos símbolos ancestrales que se repiten a lo largo de la historia, como las runas.
Todos estos dibujos canalizados e interconectados, son una clara prueba de la eficacia de este sistema de “riego de datos” a través de los canales humanos.
Afortunadamente, nuestro arte no se limita a lo que nos da el universo por ser parte de el, sino que de algún modo, nos deja parte de su poder creador, bueno, a nuestras mentes.
También es cierto, que a veces nos creemos que un dibujo, por ejemplo, lo hemos hecho por que nos apetecía, y luego nos encontramos con que la persona que hemos dibujado aparece en nuestra vida unos días después, como me sucedió en una ocasión.
Determinados dibujos abstractos como los mandalas, estimulan la apertura de los bloqueos de la persona, Otros, como los símbolos de los chakras, nos describen centros energéticos situados a lo largo del cuerpo, apoyándose en colores y formas circulares.


 
                                                                 “Cho-ku-rei” símbolo de Reiki

 
                                                                                             Ejemplo de mandala
 
                                                                                               Símbolos rúnicos

                                                                                          Símbolos de los chakras


En el arte, como en la ciencia, la literatura, o cualquier forma que tenga en hombre de difundir su conocimiento, siempre hay una vía mágica, en la que el individuo, se asocia con su conocimiento intrínseco para llegar a producir algo sagrado, una verdad, una obra cuyo triángulo sea equilátero, el equilibrio perfecto entre nuestros tres centros, vista, mente y espíritu.


Dedicado a Pedro, por inspirarme



Mar Gabarre .